El Gobierno de Perú declaró este miércoles el estado de emergencia en todas sus zonas de frontera con Ecuador, Colombia, Brasil y Chile para incrementar el “control de los ciudadanos extranjeros” en el país.
“Se ha aprobado un decreto supremo que declara el estado de emergencia en la zona de frontera de los departamentos de Tumbes, Piura, Cajamarca, Amazonas, Loreto, Madre de Dios y Tacna“, anunció la presidenta Dina Boluarte en referencia a todas las regiones peruanas que tienen frontera, a las que se suma Puno, donde ya rige ese régimen de excepción debido a las protestas.
Boluarte afirmó que esta medida “permitirá la ejecución de operaciones policiales relacionadas al control de las fronteras con la finalidad de prevenir el orden interno y los derechos constitucionales de la población”, y agregó que, en este contexto, la Policía Nacional del Perú mantendrá el “control del orden interno, con el apoyo de las Fuerzas Armadas“.
La mandataria anunció, sin embargo, que el Ejecutivo planteará al Congreso una “reforma constitucional para autorizar la intervención de las Fuerzas Armadas en las zonas de frontera”, lo que apunta a una “modificación del artículo 165 de la Constitución, para que las Fuerzas Armadas presten apoyo de manera permanente en la vigilancia y el control de nuestras fronteras”.
Por su lado, el ministro de Defensa, Jorge Chávez, señaló que el objetivo de la declaratoria de emergencia en las zonas fronterizas es “evitar el ingreso de manera irregular e ilegal” al territorio nacional.
Durante el estado de emergencia, quedan restringidos o suspendidos los derechos constitucionales relativos a la inviolabilidad de domicilio, libertad de tránsito por el territorio nacional, libertad de reunión y libertad y seguridad personales.