La probabilidad de que se genere un terremoto de gran magnitud es “más alta de lo habitual”. Ese fue el mensaje que emitió la Agencia Meteorológica de Japón (AMJ) tras el sismo de 7,1 que se registró el pasado jueves a 28 kilómetros al SE de Miyazaki.
Tras la alerta, el Primer Ministro de Japón, Fumio Kishida, anunció la cancelación de un viaje que realizaría este fin de semana para “centrarse en la respuesta del gobierno y la difusión de la información”.
El gobierno se declaró en “alerta máxima” y, en paralelo, la agencia meteorológica emitió una alerta de “precaución”. Si es que hubiesen más indicios de que el terremoto vaya a suceder de forma inminente, se declararía un nivel de alerta más grande para que los residentes puedan evacuar con tiempo las zonas propensas a sufrir las consecuencias de un tsunami.
Fumio Kishida hizo un llamado a que la población esté preparada en todo momento y para cualquier caso.