Decenas de aviones de la Fuerza Aérea israelí siguen atacando -en estos momentos- “objetivos terroristas y lanzacohetes” de Hezbolá en el Líbano, en un fuego cruzado del que también participó este sábado la milicia chií, pero sin escalar -todavía- a una guerra abierta.
“En la última hora, hemos estado atacando extensamente en el sur del Líbano, tras detectar que Hezbolá se preparaba para disparar hacia el territorio israelí”, anunció de noche el vocero castrense, Daniel Hagari.
De forma simultánea, y debido a la creciente inseguridad, el Ejército anunció a las 20:30 horas (14:30 hora Chile) nuevas restricciones para la población civil en el norte del país.
Desde la principal ciudad norteña de Haifa, la tercera más grande del país, pasando por Galilea y algunas comunidades de los Altos del Golán ocupados, quedaron prohibidas las congregaciones de más de 30 personas al aire libre y de 300 en sitios cerrados.
Además, cualquier actividad educativa debe disponer de búnkeres cercanos.
Esta noche, según la prensa hebrea, Netanyahu celebrará consultas de seguridad con ministros y altos funcionarios de Defensa en el cuartel general de Tel Aviv.