
La fundación TECHO-Chile publicó este martes su Catastro Nacional de Campamentos 2024-2025, que arrojó que, actualmente, 120.500 familias viven en ellos, siendo «la peor cifra desde la década de 1990», dijo en Cooperativa su director ejecutivo, Gonzalo Rodríguez.
El estudio -presentado en dependencias de la Universidad Alberto Hurtado (UAH), instancia a la que asistieron las cartas presidenciales Jeannette Jara (PC), Gonzalo Winter (FA) y Carolina Tohá (PPD)- también cifró en 1.428 el número de campamentos, «con una proporción de 2,9% personas por familia, por lo que en total habitan cerca de 400 mil personas», expresó Rodríguez, ingeniero civil de profesión.
«El problema de las tomas sigue aumentando en los años y eso nos preocupa: vemos, además, que estas familias están destinadas a vivir en esa condición por muchos años. No vemos que hayan soluciones reales y concretas» a sus necesidades habitacionales, agregó el director de TECHO-Chile en El Diario de Cooperativa.
De acuerdo con Rodríguez, la principal razón por la que la mayoría de las familias -un 80%- se radican en tomas «es porque no pueden pagar el arriendo, por lo que el campamento es el único camino viable para quienes son los más vulnerables de la población y destinan más de un tercio de sus ingresos en arrendar» una vivienda.
«Quienes menos tienen, viven en campamentos y eso no es una buena alternativa. Las familias viven mal y con la amenaza constante del desalojo, y hay niños que tienen sus derechos vulnerados; el 24% de la gente que habita allí son menores de edad», indicó.